Cae la noche – Devociones – 25 de octubre

Cae la noche y es tiempo de conectar con Dios

Leamos una porción bíblica y oremos al Señor. Comencemos la oración reconociendo que Dios es grande y amoroso. Continuemos presentando en oración a las personas que amamos, a nuestras amistades y familiares. Después presentemos en oración nuestras propias vidas, rogándole a Dios que nos de lo que nos conviene, no lo que deseamos. Terminemos la oración alabando a Dios, en el nombre de Jesús. AMÉN

#caelanoche #DrPj

Lectura Bíblica: 1 Timoteo 5

Deberes hacia los demás

No reprendas al anciano, sino exhórtalo como a un padre; a los más jóvenes, como a hermanos; a las ancianas, como a madres; a las jovencitas, con toda pureza, como a hermanas.

Honra a las viudas que en verdad son viudas. Pero si alguna viuda tiene hijos, o nietos, éstos deben aprender primero a ser piadosos para con su propia familia, y a recompensar a sus padres; porque ante Dios esto es bueno y agradable. La viuda que en verdad es viuda, y que se ha quedado sola, espera en Dios y noche y día persevera en súplicas y oraciones;pero la que se entrega a los placeres, está muerta en vida. Manda también estas cosas, para que sean irreprensibles;porque si alguno no provee para los suyos, y especialmente para los de su casa, niega la fe y es peor que un incrédulo.

En la lista deben figurar sólo las viudas mayores de sesenta años, y que hayan tenido un solo marido; 10 que cuente con un testimonio de buenas obras, como haber criado hijos, practicado la hospitalidad, lavado los pies de los santos, socorrido a los afligidos, y practicado toda buena obra. 11 Pero no admitas viudas más jóvenes, porque luego se rebelan contra Cristo y, llevadas por sus deseos, quieren casarse, 12 con lo que incurren en condenación por quebrantar su primera fe. 13 Además, aprenden a ser ociosas y a andar de casa en casa; y no solamente se vuelven ociosas sino también chismosas y entrometidas, y hablan de lo que no deben. 14 Por eso quiero que las viudas jóvenes se casen y críen hijos; que gobiernen su casa y no den al adversario ninguna ocasión de maledicencia. 15 Porque ya algunas se han apartado por seguir a Satanás. 16 Si algún creyente o alguna creyente tiene viudas, que las mantenga, para no gravar a la iglesia; así habrá lo suficiente para las viudas que en verdad lo son.

17 Los ancianos que gobiernan bien deben considerarse dignos de doble honor, mayormente los que se dedican a predicar y enseñar. 18 Pues la Escritura dice: «No pondrás bozal al buey que trilla», y: «Digno es el obrero de su salario.» 19 No admitas ninguna acusación contra un anciano, a menos que haya dos o tres testigos. 20 A los que persisten en pecar, repréndelos delante de todos, para que los demás también teman. 21 Te encarezco delante de Dios y del Señor Jesucristo, y de sus ángeles escogidos, que guardes estas cosas sin prejuicios y sin actuar con parcialidad. 22 No impongas a nadie las manos con ligereza, ni participes en pecados ajenos. Consérvate puro.

23 Por causa de tu estómago y de tus frecuentes enfermedades ya no bebas agua, sino toma un poco de vino.

24 Los pecados de algunos hombres se hacen evidentes antes de que ellos sean llevados a juicio, aunque a otros se les descubren después. 25 De igual manera, las buenas obras se hacen evidentes; y aun las que son diferentes, tampoco pueden permanecer ocultas.

1 Timoteo 5.24
1 Timoteo 5.24

Reseña de “Siervo de la palabra”, escrito por Christophe Zenses

Reseña Bibliográfica

Christophe Zenses. Siervo de la palabra: Manual de Homilética. Buenos Aires: ISEDET, Publicaciones EDUCAB, 1997. pp. 140. Rústica.

por Pablo A. Jiménez

Descargue en formato PDF esta reseña, publicada originalmente en la revista Apuntes 18:3 (Otoño 1998): 93-94.

El Instituto Superior Evangélico de Estudios Teológicos (ISEDET) es una de los seminarios más importantes de América Latina. El mismo ha sentado la pauta en la educación teológica en el Cono Sur. Uno de los proyectos que ISEDET ha estado desarrollando recientemente es su Programa de Educación Abierta, mejor conocido por las siglas EDUCAB. Este programa provee educación teológica accesible para líderes laicos y agentes pastores tanto en residencia como a distancia. EDUCAB produce manuales educativos muy particulares. Los mismos presentan ideas teológicas en forma accesible para el pueblo. Además, son un híbrido entre un libro y un cuaderno de trabajo (“workbook”). Esto es, contienen secciones explicativas, lecturas, ejercicios de práctica y una bibliografía comentada para dirigir los pasos de las personas interesadas en profundizar sobre el tema.

La obra Siervo de la Palabra: Manual de Homilética es uno de los libros de texto producidos por EDUCAB. Ha sido escrito por Christophe Zenses, el actual profesor de homilética de ISEDET. El libro se divide en cuatro unidades principales, precedidas por una corta introducción. La primera unidad trata el tema de la teología bíblica de la predicación, partiendo del estudio del concepto “palabra” tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento. Incluye, además, algunas pistas para la interpretación bíblica. La segunda unidad, titulada Predicación e Iglesia, explora la historia de la predicación y el lugar privilegiado que ocupa el sermón en la tradición protestante. La tercera unidad se titula Predicación: Un sistema de comunicación, tema que explica en forma exhaustiva. La última unidad se llama Elaboración del sermón. Esta propone un sistema para el desarrollo de la homilía, explicando en detalle siete modelos sermonarios. El libro concluye con varios anexos, entre los que se destaca una excelente bibliografía comentada.

El manual de Zenses de distingue del resto de los textos de homilética disponibles en español por varias características. Primero, ofrece útiles ejercicios que facilitan el uso del manual tanto a distancia como en el salón de clases. Segundo, contiene varias secciones con citas extensas sobre el tema de la predicación. La selección de las fuentes de estas citas es muy amplia, ya que entre los autores citados por Zenses se encuentran Crisóstomo, San Agustín, Martín Lutero, Karl Barth, Jacques Ellul, Fred Craddock, Juan Luis Segundo y José Severino Croatto, entre otros. Tercero, Zenses explora algunas de las perspectivas de la nueva escuela norteamericana de homilética, representada por Craddock.

Ahora bien, el aporte principal del libro es su perspectiva teológica. Zenses, quien es Europeo, demuestra un extenso conocimiento de la teoría homilética francesa y alemana. El autor se refiere con igual facilidad al desarrollo de las tradiciones homiléticas europeas como a los aportes contemporáneos a la discusión del tema. Entre los autores que cita se destaban Nelson Kirst y Gert Theissen. En este sentido, Siervo de la Palabra es una ventana a la homilética europea contemporánea.

No obstante, debemos reconocer que el manual tiene ciertas limitaciones. La primera es la tipografía, ya que el libro contiene varias erratas de imprenta. La segunda es la limitada sección teológica, que se circunscribe casi exclusivamente a los aspectos bíblicos del tema. La tercera es su inconsistente sección histórica, que prácticamente se detiene en la Reforma Protestante. La cuarta es que, fuera de los libros de Craddock, Zenses no hace referencia a la inmensa cantidad de materiales homiléticos que se están produciendo en los Estados Unidos.

Quizás la debilidad principal del libro es su uso limitado de la bibliografía producida por personas hispanoamericanas sobre el tema de la predicación. Viniendo de un profesor de ISEDET, era de esperarse que el libro incluyera un capítulo sobre Predicación y Liberación. Sin embargo, las referencias a Leonardo Boff y a Justo L. González–quienes han abordado el tema–brillan por su ausencia.

A pesar de las debilidades que hayamos podido señalar, concluimos recomendando el libro con entusiasmo. El mismo podría ser particularmente útil para la enseñanza de la predicación en escuelas teológicas de habla hispana y en programas de estudio a distancia.

Siervo de la Palabra
Siervo de la Palabra