“Si siempre haces lo que siempre has hecho, siempre obtendrás lo que siempre has obtenido”.
Partiendo de esta frase, exploramos los hábitos organizacionales de su Iglesia local.
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Siempre es preferible apoyarse en un versículo bíblico en lugar de tomar como base un dicho mundano, la Palabra de Dios no cambia, Jesús decía que ni una tilde pasaría de la ley hasta que todo sea cumplido. David tuvo una mala experiencia cuando quiso trasladar el tabernáculo en un “carro nuevo”. Las cosas se deben hacer como Dios lo ha establecido.
También los odres nuevos son los “nuevos hombres” convertidos, donde se vierte el vino nuevo que viene del Espíritu de Dios, eso no quiere decir que hay que cambiar el sistema de predicación con shows mediáticos. La Obra del Ministerio debe ser guiada por nuestro Sumo Sacerdote para siempre según el Orden de Melquisedec, Jesucristo Rey.
Tiene razón que un sermón no se debe apoyar en un “dicho mundano”. Pero lo que escuchó no es un sermón, sino una meditación sobre el liderazgo. Hay una gran diferencia. Yo nunca predicaría un sermón sin un texto bíblico como base. Dios le cuide.