Mujer Virtuosa (Proverbios 31)

Mujer virtuosa: Un sermón sobre Proverbios 31:10, apropiado para el Día de las Madres.

Audio

Bosquejo

Vídeo

YouTube

Notas en YouTube:

Vea otros sermones.

Flores
Flores

La oración de una madre (1 Samuel 1)

El oración de una madre: Un sermón basado en 1 Samuel 1, un sermón para el Día de las madres.

Audio:

Vídeo:

YouTube:

Notas Homiléticas en YouTube:

Vea otros sermones para el Día de las Madres

El mar en Puerto Rico
El mar en Puerto Rico

Corona de la creación (Génesis 2)

Corona de la creación (Génesis 2)

Corona de la creación: Un sermón sobre la creación de la mujer, basado en Genesis 2, en ocasión del Día de las Madres.

Audio:

 Vídeo:

 YouTube:

Vea otros sermones para el día de las Madres

Esperanza
Esperanza

 

En tu cumpleaños…

Un ensayo personal, recordando a mi madre, tanto en su cumpleaños como en el día de la madre.


El 30 de diciembre era mi día preferido de la temporada navideña. ¿Por qué? Simplemente porque era tu cumpleaños. Para el resto del mundo, el 24, el 25 o el 31 de diciembre eran mucho más importantes. Empero, para mí el 30 era tu fiesta; el día en que la familia se reunía para celebrar tu vida.

Madres
Yo te recuerdo

Y teníamos mucho que celebrar. Eras una mujer excepcional. No he conocido a una mujer más inocente o con mejores sentimientos que tú. Tampoco he conocido personas que sepan darse por su familia como te dabas tú. Mucho menos he escuchado de personas que sean admiradas unánimemente, como te admiraba toda persona que te conocía.

Claro está, no eras perfecta. Cometiste muchos errores, de los cuales yo fui el peor. Sin embargo, supiste amarme desde antes de mi nacimiento. Luchaste por mí y te enfrentaste al mundo como madre soltera, cuidándome con la fiereza que caracteriza a una leona que protege un cachorro.

¿Cuánto tiempo ha pasado? No sé, porque no quiero contarlo. Sólo sé que no estás conmigo. A pesar de que trato de recordarte todos los días, tu recuerdo cada día se pone más viejo y se vuelve más elusivo. La imagen de tu rostro y el sonar de tu risa se pierden en la penumbra del tiempo. Ya no recuerdo tu voz. Por eso trato de pensar en ti todos los días, por lo menos un minuto, pues temo que si yo no te recuerdo nadie te recordaría. Entonces tu ausencia sería definitiva.

Si pudieras oírme, te diría que tengo dos niñas: Paola y Natalia, a quien le decimos Tati. También tengo un hijo mayor, que ya cumplió 28 años, llamado Antonio José.

Pao sería tu nieta mimada. Se parece tanto a ti en sus actitudes, en su rostro y en su pelo. Se peina como tú, usando diademas, lazos y cintas en el pelo. En ocasiones, mis lágrimas afloran al verla peinada como tú. Me parece increíble que, habiendo nacido 23 años después de tu muerte, se parezca tanto a ti. Paola también es quien más pregunta sobre ti. Habla de su abuelita desconocida con amor y tiene una osita de peluche que lleva tu nombre, Saby. A veces, cuando me ve triste, Pao me pregunta si estoy pensando en ti. En muchas ocasiones, está en lo cierto. A veces, cuando me ve triste, Pao me pregunta si te extraño. Y yo siempre le respondo: “Todos los días de mi vida”.

Si pudieras oírme, te diría que he dedicado mi vida al ministerio cristiano. Sé que esta sería una gran sorpresa para ti, pues cuando te fuiste yo era un adolescente cuyos únicos intereses eran el ron y la rumba, en ese orden. Al morir, tu mayor preocupación era mi futuro, ya que temías que me dirigía a la perdición.

No te niego que después de tu muerte me hundí en el alcohol. Pero cerca de diez meses después de tu partida, tuve una experiencia de fe. Fue sencilla, pero me llevó a la certeza de la existencia de Dios. Comprendí que Dios me ama, me acepta y me perdona. Desde ese día estoy sobrio; y desde ese día le sirvo Jesucristo, mi Señor y salvador.

El 30 de diciembre era mi día preferido de la temporada navideña. ¿Por qué? Simplemente porque era tu cumpleaños. Hoy es el día más difícil de toda la temporada. ¿Por qué? Simplemente porque sigue siendo tu cumpleaños.

Ahora descansa en paz, mamá. Te veré en la mañana; en la mañana de aquel día cuando “se doble toda rodilla de los que están en los cielos, en la tierra y debajo de la tierra; y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor” (Filipenses 2:10-11).

Ve otros escritos dedicados a la madre.

Ese hijo es mío (1 Reyes 3)

Un sermón para el Día de las Madres, basado en 1 Reyes 3, el texto donde Salomón media entre dos madres en conflicto por un hijo muerto.

Otros sermones apropiados para el Día de las Madres.

www.drpablojimenez.com
www.drpablojimenez.com

Sermones para el Día de las Madres

Corona de la creación: Un sermón sobre la creación de la mujer, basado en Genesis 2, en ocasión del Día de las Madres (AudioVídeo & Youtube).

Ese hijo es mío: Un sermón para el Día de las Madres, basado en 1 Reyes 3, el texto donde Salomón media entre dos madres en conflicto por un hijo muerto. (YouTube)

La oración de una madre: Un sermón basado en 1 Samuel 1 (AudioVídeoYoutube y Notas Homiléticas en Youtube).

El Dios maternal: Texto de un sermón sobre Génesis 21:17-19. Su tema central es: “El amor de Dios por la humanidad es comparable al amor de una madre por su cría.”

El Dios maternal: Un sermón basado en Génesis 21:17-19 (Audio & Youtube)

Mujer virtuosa: Un sermón sobre proverbios 31:10, apropiado para el día de las madres (AudioBosquejoVídeoYouTube & Notas en YouTube).

Honra a tu padre y a tu madre – Éxodo 20.12

Honra a tu padre y a tu madre: Un sermón sobre Éxodo 20.12, apropiado para el Día del Padre o el Día de la Madre.

Vea otros sermones para el Día de las Madres.

Mujer Virtuosa – Proverbios 31

Mujer virtuosa: Un sermón sobre Proverbios 31:10, apropiado para el día de las madres.

Orquidea
Orquidea